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F. 40r. Por los tiempos de Clemente Colling. Cuaderno 1

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Transcripción

M en tinta de FH

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habían dicho que soltaban, para defenderse un fuerte chorro
de orin, y que dejaba daba en los ojos y que dejaba ciego. Una
noche de lluvia, después que yo estaba acostado vino
a mi cama y vi que levantaba las cobijas en la parte
de los pies, y enseguida sentí en los pies la barriga
viscosa y fría de un sapo. Algunas noches después,
mi madre notó un ruido raro después de apagada
la luz; prendió rápidamente un fósforo y descubrió
que yo dormía con los pies y las piernas contra la para
arriba, y <dejados> contra la pared. Recuerdo muy bien la angus-
tia de cuando apagaban la luz, de las de cuando la
mecha de la lámpara dejaba escapar los últimos hipos,
y que al final, después de casi apagada del todo ha-
cía un hi el último hipo tardaba más pero era mas
grande y ya todo quedaba completamente oscuro.
Entonces empezaba a ver sapos en mi cama y a poner
los pies en la pared. Mi madre me llevaba para
su cama y mi padre venía a la mía. Cuando mi
madre estaba por dormirse yo le daba un codazo por-
que todavía seguía sintiendo miedo a los sapos.
Petrona cuidaba que todos tuvie contribuía a malcriarnos por-
que era muy buena y nos hacía todos los gustos. Y esto
desde la mañana hasta la noche. Todavía en la

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F. 40r. Por los tiempos de Clemente Colling. Cuaderno 1

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